".. y la música que la hace posible".
Norberto James Rawllings
La música es un producto creativo del alma y la imaginación humanas. Si la música es suave, imaginativa, serena, sus efectos en nosotros serán iguales. Y ahora, ahorita mismo (como diría un mexicano) con una pandemia avasallante, lo que más necesitamos son esas cosas cariñosas, acariciantes, capaces de penetrarnos profundamente sin que temamos el mal contagio que actualmente aterroriza al mundo.
Pero debe ser música pura. Saquenle las palabras. Las canciones traen frecuentemente a rastras un conflicto cualquiera. Necesitamos paz, perdón, ensueño, vuelo sin aleteo, semejante al de la aviación.
Nada olvida ni perdona tanto como la música, después de Jesucristo, claro está.
Recomiendo hasta el jazz, del más clasico.
Piezas excelentes tocan Herb Allpert, Anthony Ventura, Kenny G, Phil Collins Big Band, y muchas otras Big Bands que andan por el mundo. Pero los clásicos son insuperables. Todos han escuchado a Franz Schubert, Vivaldi, Beethoven y a los otros fallecidos decenios ha. Todavia viven, gracias a su música tan especial. Así nos haría sobrevivir también a nosotros escucharla con atención.
El poder de Jesús ante todo. Luego la música y cualquier ser humano sensible.
Paz para todos.
Dr. Juan Manuel Rosario
2021